Retuvieron a un camión en el que viajaban trabajadores hacinados

Efectivo policiales del Destacamento Carro Quemado y del Puesto Caminero de "El Durazno" retuvieron este domingo al mediodía a un camión térmico en el cual viajaban el chofer y 13 personas.

Se trató de trabajadores "golondrina" que se dirigían desde la provincia de Mendoza hacia la ciudad de General Conesa (Río Negro), a donde iban a desarrollar tareas en la cosecha de cebolla. En principio, por el hecho se determinó la detención del camionero y el envío inmediato del grupo de trabajadores a la ciudad de Santa Rosa. En horas de la noche, funcionarios provinciales constataron que no se trataba de trata de personas y los mismos trabajadores decidieron continuar su trayecto luego de brindar testimonios.
Según informaron desde el Ministerio de Seguridad de La Pampa, el ilícito se detectó en horas del mediodía del domingo en el Puesto Camionero ubicado en la intersección de las rutas provinciales 13 y 14. En ese momento, los efectivos divisaron un camión al que detuvieron para realizar una inspección del rodado y de los ocupantes. Así fue como el personal policial constató que de las 14 personas que viajaban, dos de ellos no portaban con documentación que acreditara su identidad.

Investigación.
El suceso provocó la movilidad de personal de la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional Uno (URI) y del Área de Trata de Personas de la Policía de La Pampa. Llegados al lugar los funcionarios constataron la irregularidad y por orden de la Jueza Federal, Iara Silvestre, se determinó la detención del camionero y el inmediato traslado del grupo de trabajadores a la capital provincial. La investigación preliminar permitió conocer que el grupo procedía de la provincia cuyana, donde había cumplido tareas similares, dentro del contexto irregular en el que algunos productores del interior nacional suelen avanzar con contratos desfavorables a los trabajadores informales, indicaron desde el Ministerio.

No se constató la trata.
El secretario de Derechos Humanos, Antonio Curciarello, y su equipo, fueron citado por las autoridades para que entreviste a los trabajadores. En este sentido el funcionario dijo a LA ARENA que "todos viajaban en el chasis del camión, con colchones, violando -si se quiere- leyes de tránsito y en condiciones inhumanas", mientras tanto transportaban dos camionetas en el acoplado térmico y eran propiedad de dos de las personas que eran trasladadas. "Las llevaban de esa manera para ahorrar combustible", se informó. Una vez en la capital pampeana, funcionarios se entrevistaron con las personas y les hicieron un informe psicosocial. "Las personas estaban en libertad, se les dio comida y alojamiento, pero decidieron continuar con su trayecto. El chofer luego fue notificado en libertad", sostuvo Curciarello y agregó que "ellos estuvieron en una dependencia policial por dos o tres horas, merendaron y se hizo la entrevista". Para las 21 de anoche, los trabajadores (entre ellos un menor de 17 años que estaba con su padre) regresaban a buscar los vehículos y continuar con el viaje.
"Nosotros no constatamos si existía trata de personas, por eso intervino el Juzgado Federal. Ellos están en libertad, no eran victimarios -eventualmente serían víctimas- pero prefirieron continuar viaje", concluyó el secretario.