La inacción de VN produce más deterioro de las rutas

Las rutas que atraviesan la provincia se siguen deteriorando y la indiferencia del gobierno nacional, con el nulo interés de parte del organismo que debe controlar la conservación y mejoramiento de la Red Troncal de Caminos, aumenta los riesgos al momento de transitarlas.

 

Resulta indudable que la decisión de llevar la obra pública nacional a cero posibilita que circulen vehículos excedidos de cargas, y también sin control de sus dimensiones sin cumplir con las normativas correspondientes.

 

La Asociación Gremial de Profesionales y Personal Superior de Vialidad Nacional viene advirtiendo sobre la situación. Desde el Gobierno Nacional se viene pregonando que “la obra pública cero es una alternativa de altísimo riesgo. Es una medida posible, pero solo para generar un shock y resolver una coyuntura, en un brevísimo espacio de tiempo, pero que no puede eternizarse porque tendría consecuencias extremadamente graves y en muchos casos, irreversibles”

 

La Dirección Nacional de Vialidad tiene la obligación de administrar la Red Nacional de Caminos, con una extensión aproximada de 40 mil kilómetros. Esto implica el estudio, construcción, conservación y mejoramiento de la Red Troncal Nacional de Caminos. Para eso se deben hacer tareas para proteger la integridad de los caminos, de modo tal que aumenten su vida útil.

 

Se sabe que la Dirección Nacional de Vialidad posee 70 puestos de control estratégicamente distribuidos en todo el país, que en conjunto con los de los organismos viales provinciales en sus respectivas jurisdicciones, conforman una vasta red disuasiva para evitar los excesos de cargas.

 

Estos puestos, para lograr la eficiencia, deben funcionar las 24 horas del día, durante los siete días de la semana, donde se planifican equipos de trabajo en tres turnos, con la asistencia de Gendarmería Nacional o las Policías provinciales, que le brindan el poder de fuerza que garantiza la viabilidad del sistema.

 

Muchas carencias.

 

Los propios profesionales que se desempeñan en DNV señalan que “la desfinanciación que se está generando desde la Dirección Nacional de Vialidad, por la aplicación del concepto de Obra Pública ‘0’, afecta a los Puestos de Control de Pesos y Dimensiones, dejándolos sin fuerza de seguridad para resguardo de la integridad de los bienes y personas, a raíz de la caída de los contratos de adicionales de la fuerza policial por falta de pago desde diciembre 2023”.

 

También hay falta de personal de balanza, recorte de viáticos y falta de pago de adicionales (desarraigos, comidas y viáticos), del personal de Vialidad Nacional de los puestos de control desde diciembre 2023.

 

Incluso dejar los puestos solos, sin seguridad ni personal de vialidad, implica abandono de los bienes públicos: infraestructura, equipamiento de pesaje, informático y tecnológico. Y señalan desde la Asociación Gremial de Profesionales –cuyo titular es el ingeniero José Raúl Risso-, que

 

la situación permite que se vandalicen los puestos. Y además el abandono de esos sitios da lugar a que quienes conducen vehículos se confían de la falta de controles e incrementan las cargas de los mismos.

 

Según los profesionales, ese panorama “reduce la vida útil del pavimento teniendo el Estado que repavimentar en un tiempo menor; afecta a la seguridad vial, el transporte de cargas con excesos es peligroso para el usuario común; y también incurre en competencia desleal ante otro transporte, lo que implica que el transporte que circula en norma pierde el trabajo. Por todo eso se solicita que los puestos de control estén operativos y que la Dirección Nacional de Vialidad esté controlando en todo momento, incluso bajo las más adversas condiciones climáticas (lluvias, nieve, hielo, etc.)”.

 

Riesgos potenciales.

 

La Asociación manifiesta que se entiende que “el Gobierno Nacional ha iniciado su mandato hace más de cuatro meses, con inexperiencia en este tipo de actividades de características particularísimas y por ello, alertamos a las autoridades acerca de los riesgos potenciales de minimizar las consecuencias de desfinanciar los Puestos de Control de Pesos y Dimensiones”.

 

Es por eso que la entidad requiere “la urgente revisión de las restrictivas medidas económicas a adoptar”, y pone “al servicio del sistema los elementos necesarios, para su óptima funcionalidad, dentro de un presupuesto coherente que optimice un resultado positivo en el cuidado del trazado terrestre de la vía de comunicación, no solo de rutas nacionales, sino también su extensión al trazado provincial y municipal, ya que el exceso de cargas no controlado afecta a todo el recorrido que realice el vehículo en cuestión”.